Atardecer en Alcalá de Guadaíra |
Este Ayuntamiento acaba de meternos de nuevo la mano en el bolsillo. El IBI que pagamos por vivir en una ciudad de segunda que no tiene ni transporte público a la capital, es de primera. Tanto es así que ha fraccionado el vergonzoso impuesto en dos mitades. La vivienda, fruto del ahorro y una de las necesidades sociales más importantes, acabará convirtiéndose en un lujo gracias a tres entidades. Los bancos que han especulado con ella junto a las inmobiliarias para inflar su precio; las eléctricas, que nos cobran por unos servicios básicos precios de artículo de joyería, y los ayuntamientos, que han visto el filón para tapar su nefasta gestión subiendo de manera arbitraria el IBI todos los años. Ahora, los trabajadores, los que tenemos esa suerte y no estamos en la mayor empresa de la democracia de España (casi seis millones de afiliados) tendrán que calcular que ya no solamente lo hacen para el Estado central y las autonomías, sino también para mantener al poder político local y sus adláteres.
Si este Consistorio fuera de verdad socialista, no duraría
un instante en congelar la subida que todos los años hace del IBI y que bloquea
muchas economías alcalareñas. Además, tendría que suprimir el pago de las
familias que demostraran fehacientemente que todos sus miembros se encuentran
en paro y no reciben ningún tipo de ayuda. También calcular un IBI reducido
para las casas cuyos propietarios son pensionistas e incluso, como medida para
proteger nuestro patrimonio cultural, aplicar también esa minoración a las
viviendas con más de cien años de antigüedad a cambio de que las reformas que
se hagan estén supervisadas por expertos. Pero no se preocupen, no lo hará. Ni
este, ni el que venga.
El problema es que todo tiene un límite. El mismo que hace
reaccionar a los partidos políticos cuando se ponen muertos encima de la mesa
por suicidios ante los desahucios. Unas líneas rojas que una vez traspasadas no
son capaces de mantener la paz social que garantiza la estabilidad de la que
todos nos beneficiamos. Hagan cálculos y sepan con lo que se juega.
PUBLICADO EN LA VOZ DE ALCALÁ EL 15 DE NOVIEMBRE DE 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario