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| Patio de butacas del teatro Calderón de la Barca de León |
Al concluir el primer acto, el crítico del prestigioso diario pensó en calificarla de “obra novel, mal traducida, dirigida mediocremente y pésimamente interpretada por un elenco de actores jóvenes y sin experiencia”.
En el descanso, los espectadores se levantaron y ocuparon las tablas, dejando el patio de butacas al grupo de cómicos.
Entonces, se inició el segundo acto, donde, animadamente, se sucedieron interesantes juegos dialécticos y los enfrentamientos entre los otrora asistentes a la sesión alcanzaron un clímax dramático.
Entonces, al crítico le pareció que la obra estaba mejorando de nivel y que los nuevos actores se caracterizaban por su donosura, atrevimiento y capacidad interpretativa.
En el tercer, y último, acto, la tensión entre los actores-espectadores provocó varios muertos sobre el escenario, diversos heridos y una batahola inmensa.
El crítico, tras recuperarse de las heridas sufridas durante la representación, publicó un elogioso texto, en el que enfatizó cómo la intervención de un nuevo grupo de actores y un novedoso director de escena elevó la calidad del drama hasta cumbres nunca vistas en la ciudad.
DOMINGO CARBAJO VASCO
Inspector de Hacienda
Madrid, 08.02.2014
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